
A todos nos pasa. Una cierta pugna interna siempre se libra en nuestro interior, cuando alguien nos gusta. Los nervios, la ansiedad y la incertidumbre de no saber lo que se oculta tras ese alter que nos resulta tan atractivo! Estos sentimientos negativos, a veces nos comen, dejandonos inmoviles... Y terminamos siendo unos completos ineptos cuando estamos frente a ESA persona especial... uff!
El tiempo pasa, los días se acumulan y podemos seguir tan tímidos como al comienzo, por miedo al rechazo. Pero siempre, en el fondo de nuestros más intimos secretos, albergamos el dulce sueño en donde puede surgir alguna oportunidad.
Yo nunca he logrado zafarme al cien porciento de mis complejos, siempre hay unos pequeños mounstritos (asi como los de Liniers) tras mis oídos que se encargan de recordarme cada uno de mis defectos. Me hacen acordar a mi hermana, que -cuando eramos chicas- me molestaba siempre por mi gordura, sacaba mis faldas y se burlaba de lo "anchas" que eran. Es que cualquier cosa es más ancha, si tu talla de pantalon es 36 y eres flaca como un palito...
Nunca he logrado zafarme de todos mis complejos, siempre hay algo que me impide seguir el sueño aquél. Y las veces que he logrado zafarme de los mounstritos, ya es demasiado tarde.
La Javi, para variar, siempre llegando tarde a todas partes.
El tiempo pasa, los días se acumulan y podemos seguir tan tímidos como al comienzo, por miedo al rechazo. Pero siempre, en el fondo de nuestros más intimos secretos, albergamos el dulce sueño en donde puede surgir alguna oportunidad.
Yo nunca he logrado zafarme al cien porciento de mis complejos, siempre hay unos pequeños mounstritos (asi como los de Liniers) tras mis oídos que se encargan de recordarme cada uno de mis defectos. Me hacen acordar a mi hermana, que -cuando eramos chicas- me molestaba siempre por mi gordura, sacaba mis faldas y se burlaba de lo "anchas" que eran. Es que cualquier cosa es más ancha, si tu talla de pantalon es 36 y eres flaca como un palito...
Nunca he logrado zafarme de todos mis complejos, siempre hay algo que me impide seguir el sueño aquél. Y las veces que he logrado zafarme de los mounstritos, ya es demasiado tarde.
La Javi, para variar, siempre llegando tarde a todas partes.
* La caricatura de hoy es de Liniers
0 comments:
Post a Comment